TONTA POR NORMA

Si hubiéramos sabido tanto de ti hace seis décadas largas como pretendemos saber ahora, seguro que alguien te habría echado una mano antes de que te hundieras en el sueño eterno, voluntario o no. De nada valen ya las lamentaciones y los condicionales: te perdimos, Norma Jean, antes de saber si cumplirías tus promesas, antes de que nos diéramos cuenta de que no eras únicamente un precioso estuche vacío. Como si llevaras a la espalda un cartel donde se leyera “tonta, patéenme”, no quisieron ver en ti más que a una nueva estrella de la Fox dispuesta a llenar el ocio de los desocupados, una estúpida, porteadora de un cuerpo escultural. ¿Quién eras en realidad? ¿La niña triste y solitaria hambrienta de amor y comprensión? ¿El sueño de miles de hombres sobre terciopelo rojo? ¿Una mala actriz que no podía aprenderse las líneas y que jamás llegaba puntual? ¿Una mujer que intentaba hacer su trabajo, ampliar sus miras, explotar su talento? Una mezcla de todo eso, y más.

Te han diseccionado en tantas piezas que es imposible formarse una idea de conjunto y hay que atender sólo al corazón, a lo que tu imagen y tus palabras nos sugieren directamente, sin intermediarios que te engrandezcan y análisis que te reduzcan a un despojo humano. Y cuando nos acercamos a ti con tu misma inocencia, con la ingenuidad de recién llegados al complicado universo del celuloide, recibimos el impacto tremendo de una fuerza de la naturaleza hecha mujer y convertida en mito contradictorio, producto de una época determinada y que, como una imparable catarata, sigue produciendo energía muchos años después. Tú eras el corderillo en la jungla de asfalto, la ofrenda que Hollywood se sacrificó a sí mismo para demostrar su poder. Pero con tu destrucción paulatina caíamos nosotros también. Desaparecía esa parte infantil que no debería abandonarnos nunca, la naturalidad y el impudor que Eva perdió en el paraíso y la confianza en que la vida no puede portarse siempre tan mal con nosotros.

Querías mejorar, querías aprender, necesitabas que te quisieran y que te abrieran las puertas: demasiado miope para reconocer que te faltaba la fuerza, la suplantabas con el poderoso empuje de tu físico. Entrañable, esa es la palabra; como nuestro osito de peluche, que nos da lo mejor que tiene cuando le necesitamos y luego, cuando el paso de los años empieza a mancillarlo, a mutilarlo, requiere de nuestro cariño y nuestro amor para seguir despidiendo calor y ternura. Sí, Marilyn, tus pies nunca fueron lo bastante grandes para abarcar las huellas frente al Teatro Chino. La culpa fue tuya, nuestra, y de la persona que no contestó al teléfono aquella noche de agosto. Filmografía de Marilyn Monroe (1926-1962) 1947: "The Shocking Miss Pilgrim" George Seaton y Edmund Goulding 1948: "You Were Meant for Me" Lloyd Bacon 1948: "Scudda Hoo! Scudda Hay!/Summer Lightning" F. Hugh Herbert 1948: "Dangerous Years" Arthur Pierson 1949: "Ladies of the Chorus" (Las chicas del coro) Phil Karlson 1949: "Love Happy" (Amor en conserva) David Miller 1950: "A Ticket to Tomahawk" (Billete para Tomahawk) Richard Sale 1950: "The Asphalt Jungle" (La jungla de asfalto) John Huston 1950: "All About Eve" (Eva al desnudo) Joseph L. Mankiewicz 1950: "The Fireball" (Ruedas de fuego) Tay Garnett 1950: "Right Cross" John Sturges 1951: "Hometown Story" Arthur Pierson 1951: "As Young As You Feel" Harmon Jones 1951: "Love Nest" Joseph Newman 1951: "Let's Make It Legal" Richard Sale 1952: "Clash By Night" (Encuentro en la noche) Fritz Lang 1952: "We're Not Married" (No estamos casados) Edmund Goulding 1952: "Don't Bother To Knock" (Niebla en el alma) Roy Ward Baker 1952: "Monkey Business" (Me siento rejuvenecer) Howard Hawks 1952: "O. Henry's Full House" (Cuatro páginas de la vida, episodio "The Cop and the Anthem) Henry Koster 1953: "Niagara" (Niágara) Henry Hathaway 1953: "Gentlemen Prefer Blondes" (Los caballeros las prefieren rubias) Howard Hawks 1953: "How to Marry a Millionaire" (Cómo casarse con un millonario) Jean Negulesco 1954: "River of No Return" (Río sin retorno) Otto Preminger 1954: "There's No Business Like Show Business" (Luces de candilejas) Walter Lang 1955: "The Seven Year Itch" (La tentación vive arriba) Billy Wilder 1956: "Bus Stop/The wrong kind of girl" (Bus Stop) Joshua Logan 1957: "The Prince and the Showgirl" (El príncipe y la corista) Laurence Olivier 1959: "Some Like It Hot" (Con faldas y a lo loco) Billy Wilder 1960: "Let's Make Love" (El multimillonario) George Cukor 1961: "The Misfits" (Vidas rebeldes) John Huston 1962: "Something's Got to Give" George Cukor (Inacabada) http://www.imdb.com/name/nm0000054/